Tristeza, rabia e indignación son algunos de los sentimientos de Verónica Tapia y su familia por los nulos resultados que ha arrojado la búsqueda de su perro Cholito, un can rescatado desde la comuna de Maipú que se extravió cuando estaba a cargo, según denuncian, del adiestrador Rodrigo Aguirre dado al viaje de sus humanos. De acuerdo a los antecedentes, el can se perdió en la calle Martín de Zamora, comuna de Las Condes.
La historia de Cholito comenzó a escribirse a mediados del 2016 en Maipú, fue en ese lugar que un vecino instaló en la vía pública dos casas para canes donde vivían el protagonista de ésta historia y su amigo cocker. Un pasar tranquilo para estos dos animales que de un día a otro cambió radicalmente, dado al atropello del segundo animal dejando a nuestro amigo Cholito sin su compañia del día a día.
Durante el día salía y volvía a la casa Cholito , lloraba porque su compañero no estaba. Yo tenía dos perritos en la casa y fui a hablar con el vecino para ver si era posible que me lo trajera a la casa porque me daba pena que llorará, el vecino me dijo que sí y lo trasladé a mi casa”, recuerda Verónica Tapia, quién junto a su hija decidieron transformar al can en un miembro más de la familia, en entrevista con EPA news.
Cholito, al igual que muchos canes, había sufrido la indiferencia y el maltrato animal de los humanos en su transitar por la calle. Fue quemado con ácido y a causa de ello, era muy temeroso y le costaba interactuar con las personas: lentamente fue acostumbrándose al estar en una casa con gente cuya norte era cuidarlo y protegerlo
Tras seis meses en el hogar y en el contexto de un viaje de la familia al extranjero, los canes fueron dejados en un hotel canino a excepción de Cholito. “Como íbamos a salir de vacaciones, buscamos a una persona que pudiera tratar a Cholito dado a que en el otro lugar donde dejamos a los perros no lo podían recibir dado a que no se daba con la gente y pensábamos que le podía pegar a los otros perritos que estaban como huéspedes”, explicó Tapia. Así llegaron al adiestrador Rodrigo Aguirre Abarca, quién se comprometió a cuidar al perro durante los 10 días que durarían las vacaciones.
De acuerdo a Verónica, Rodrigo se llevó a Cholito el día 6 de Marzo 2017 . Tras recibir noticias del estado de Cholito el día 7, “el día 8 de Marzo no tuvimos ninguna noticia de Cholito por parte de Rodrigo, entonces le escribimos para saber cómo estaba Cholito y no tuvimos ninguna respuesta. El día 9 mi hija nuevamente le escribió para tener una respuesta durante la mañana y tipo 7-8 de la tarde de ese día Rodrigo le contesta que, lamentablemente, Cholito se había perdido hace dos horas en Las Condes en Martín de Zamora con Manquehue”, acota Tapia. Luego de ese aviso, se mantuvo el contacto con el adiestrador donde éste le indicaba a la familia que estaban buscando al can sin lograr resultado positivo.
Pese a los esfuerzos de la familia por regresar antes desde República Dominicana, no pudieron hacerlo y a los pocos días, señalan, el adiestrador bloqueó a los humanos de Cholito y a las personas que estaban ayudando a buscar a Cholito en nuestro país.
Luego del arribo de Verónica y su familia a Chile, comenzaron a buscar intensamente a Cholito por las zonas cercanas a donde se perdió para, después, ampliar el radio de búsqueda a todo Santiago.
Cholito tiene su pecho blanco al igual que sus patas traseras y es un can muy temeroso a causa de su historia. Si lo ve retener y llamar a los fonos 91223970, 92973350 y 93543985.
Cabe señalar que tras el extravió de Cholito cuando estaba a cargo de Rodrigo Aguirre, la familia del can demandó al adiestrador y actualmente el juicio está en su proceso judicial.
En este contexto, EPA contactó al adiestrador con el fin de que entregará su versión de los hechos y éste indicó que iba a hablar con su abogado con el fin de decidir si entregar su visión de los sucesos narrados. Asimismo, precisó que no le parece adecuado dar cuenta del hecho si hay un juicio de por medio.
