Gato fallece tras ser rechazada su atención en una clínica veterinaria de Concepción, por encontrarse su personal almorzando

0
1179

Indignación, tristeza e impotencia son algunos de los sentimientos presentes en la comunidad animalista de la Región del Bío Bío, tras conocerse el deceso de un felino durante la tarde de este domingo luego de ser negada su atención en la Clínica Veterinaria SOS Animales de Concepción a causa de encontrarse el personal almorzando. La situación afectó a Camila González, una joven rescatista independiente de 21 años que vive en el sector de Boca Sur perteneciente a la comuna de San Pedro de la Paz. 

De acuerdo a Camila, el gato se encontraba en mal estado y fue rescatado por ella, luego de que un conocido le reportara la existencia del animal y el cual se encontraba en San Pedro de La Costa. Tras ello, el animal recibió una serie de atenciones médicos veterinarias por su estado de salud y las constantes convulsiones sufridas, las cuales provenían, según los informes, de un golpe sufrido que le ocasionó un problema neurológico. 

El día domingo, acota González, “la convulsión le duró más de 40 minutos, por eso fui a la clínica. Pedí un auto y llegué, les expliqué el caso, que estaba grave, que era una emergencia, que estaba casi agonizando y no. No hubo caso, decían que estaba el personal almorzando”, indicó la rescatista en declaraciones a Radio Bío Bío de Concepción. 

Según la denunciante, quién negó la atención médica fue la recepcionista, pese a estar en antecedentes del estado de salud del felino y el fue bautizado como Oreo. ” Vuelva en una hora, o vaya a Manuel Bulnes”, le decía la recepcionista recuerda Camila. 

Ante ese escenario, agregó la rescatista, “le dije a mi pololo que me pidiera otro auto, ya cuando íbamos en camino el gatito ya falleció. Yo llegué con él vivo a la clínica”, enfatizó Camila. 

La versión de la clínica 

La clínica junto con lamentar los hechos y anunciar sanciones contra los responsables, precisó que todos los fines de semana cuentan con 2 médicos veterinarios, quienes son apoyados por dos enfermeras y una recepcionistas. Pero cuando ocurrieron los hechos, uno de sus colaboradores no había podido asistir producto de un problema de salud. 

Bajo esas circunstancias, acotó la entidad, “una vez asistió la tutora de la mascota a nuestra clínica, fue atendida por la recepcionista, quien la recibió y cometió el error de derivar su atención a otro centro asistencial cercano, no informando al médico veterinario del estado de paciente, quien efectivamente estaba haciendo uso de su horario legal de colación. Como centro veterinario lamentamos profundamente la manera en cómo se desarrollaron los acontecimientos y nos afecta profundamente esta situación con el gatito y la tutora, puesto que nuestra intención y consigna como profesionales garantes de la seguridad y protección de todos los animalitos es siempre el dar lo mejor por todos los pacientes”, precisó la Clínica Veterinaria SOS Animales. 

Asimismo, dijeron, “lamentamos como estos hechos se han traducido en conductas de funas, repudio, acoso y amenazas para quienes trabajamos en la clínica. Reiteramos las disculpas pertinentes por un error  e insistimos que nuestra consigna es a propender a una atención integral y con pleno respeto a todos los animalitos”, concluyó el recinto médico. 

¿Qué normas regulan el funcionamiento de las clínicas veterinarias en Chile?