#SANTIAGO Crean la primera área de conservación de los Murciélagos (AICOM) en la Región Metropolitana

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29 de Diciembre 2019

*Contando con la zona de conservación del animal de Santiago, que se instalará en unas minas abandonadas de Lampa, hay 5 áreas de dicho tipo a nivel nacional. 

La iniciativa, financiada con el fondo Rufford, busca proteger y servir de oasis a las seis especies pequeñas e insectívoras que habitan en la zona como lo son: murciélago orejudo mayor (histiotus macrotus), orejudo menor (histiotus montanus), orejas de ratón de Chiloé (myotis chiloensis), de cola libre (tadarida brasiliensis), colorado (lasiurus various) y ceniciento (lasiurus cinereus).

Entre las principales amenazas que sufren estos quirópteros se encuentran: pérdida de su hábitat, uso de sustancias tóxicas, alta velocidad en los aerogeneradores (lo que provoca que choquen con sus aspas y se revienten los pulmones) y la desinformación y prejuicios equivocados que relacionan a estos inocentes mamíferos con películas de terror.

Por el contrario, estos simpáticos animalitos son controladores naturales de insectos lo que ayuda a la agricultura y a la disminución del uso de pesticidas, además sus fecas son excelente abono para fertilizar dada su alta cantidad de nitrógeno, fosfato y potasio. Otros son polinizadores lo que es vital para la supervivencia de todos nosotros y los murciélagos que son carnívoros, controlan la población de roedores y reptiles.

El año pasado un murciélago bebé cayó en el frontis de un mall del centro de Santiago, generó tanto alboroto que el guardia de una conocida marca de ropa lo pateó varias veces sin piedad. Por suerte unos jóvenes lo rescataron.

Acciones como ésta NO deben ocurrir. Según informa el Programa para la Conservación de Murciélagos en Chile, si ud encuentra uno de estos ejemplares, debe usar guantes y colocar tranquilamente al quiróptero dentro de una caja con agujeros para que respire. En la noche, subir a un árbol o dejarlo a unos 1.5 metros de altura, sacar la tapa y él se irá solo.

Según expertos, la probabilidad de transmitir rabia es bajísima, por lo cual no hay que temer. Además es importante saber que muchos murciélagos sanos mueren al hacerles el test de rabia. En otros países sin embargo, sólo analizan la sangre, sin eliminarlos: medida que sin duda hay que implementar en Chile.