Leandro Fruitos: “La violencia hacia los animales es uno de los aspectos que más enfurece a la sociedad de cara a la tracción a sangre”

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La frontera entre el uso y el abuso de los animales no humanos suele ser difusa. Prácticas tales como ciertos “deportes”, tradiciones o industrias, que en antaño no generaban mayor cuestionamientos, hoy se encuentran bajo la mira de quienes nos preocupamos y ocupamos de la dignidad de los animales no humanos. Esta situación no escapa a la “tracción a sangre”, entendida como el uso de animales como “motor” en vehículos de transporte.

Esta situación, sin embargo, engloba problemáticas que exceden la sola situación deplorable del animal no humano, abarcando también temáticas sociales y de derechos humanos, de los mismos humanos que se sirven de estos animales como herramienta de trabajo. Discriminación, segregación y pobreza son algunos de los problemas que abarca esta particular práctica.

Chile no está ajeno a esta realidad, por lo que los invito a conocer la plataforma AcerTaS!, de la Fundación Franz Weber, en palabras de mi querido compañero Leandro Fruitos, Coordinador Latinoamericano de Red Internacional AcerTaS! y la experiencia de trabajo en Argentina.

-¿Cuál es el panorama que se observa a lo largo del país, en cuanto a la tracción a sangre y el uso de animales?

“La tracción a sangre en Argentina representa un estrategia de supervivencia de las poblaciones más vulnerables de la sociedad. 250.000 familias se estima que recurren a prácticas de uso de carros y equinos como de medio de transporte en zonas urbanas, en su mayoría el uso está asociado a prácticas laborales de alto riesgo, como es el caso de la manipulación de residuos sólidos urbanos. 70.000 equinos tiran de un carro. 57.000 infantes se encuentran involucrados en este entorno hostil. Son cifras que preocupantes, pero aún más preocupante resulta la falta de información oficial, y en consecuencia la ausencia de políticas públicas específicas para mitigar dicha problemática.

La violencia hacia los animales es uno de los aspectos que más enfurece a la sociedad de cara a la tracción a sangre. Si bien este tipo de violencia no es una práctica habitual, sí se puede aseverar que cuando se presenta es altamente visibilizada por los medios de comunicación y organizaciones de la sociedad civil que buscan velar por los derechos de los animales. Ante este escenario la mayoría de las familias que utilizan carro y equinos son segregados como “maltratadores de animales” independientemente de si realmente el acto de violencia haya existido o no.

Lo anterior es importante destacar porque sin lugar a dudas es uno de los factores que maximiza la vulnerabilidad social, y la falta de oportunidades ante un contexto social agresivo, opresor e indiferente a la realidad humana que transcurre arriba de un carro.

Hablar de tracción a sangre, es hablar de pobreza multidimensional. La pobreza que padecen las familias que utilizan carro y equinos no es una pobreza de “billeteras vacías”, resulta necesario valorar variables tales como la vivienda, el saneamiento básico, educación, salud, entre otros. Es decir, la utilización de un carro y equino en la Argentina no siempre responde a un aspecto monetario, sino de vulnerabilidad social”. 

-Ustedes, de acuerdo a los antecedentes que manejamos, lanzaron una campaña que se llama Basta de Tas. ¿Cuáles son los postulados principales de la iniciativa y como ha sido la respuesta, tanto de las autoridades como de los otros actores sociales involucrados?.

“Hemos evolucionado. Desde el lanzamiento de la campaña “Basta de TaS” en la Argentina en el año 2012, fueron muchos los aprendizajes que hemos ido capitalizando para podemos constituirnos en Red, lo que hoy conocemos como Red Internacional AcerTaS (Asamblea Común para la Estrategia de Reemplazo de la Tracción a Sangre).

En la actualidad somos un equipo interdisciplinario de asesores gubernamentales que nos proponemos acercar a los gobiernos locales el know how para el diseño e implementación territorial de la política pública de sustitución de la tracción a sangre por tracción motora.

Nuestro modelo de trabajo está basado en una Gestión 2.0 que posibilita tener capacidad de respuesta ante los grandes desafíos sociales que se presentan en el territorio. Los buenos valores y prácticas políticas  nos posibilitan construir vínculos sustentables con el público objetivo: dirigentes políticos y sociales.

Fruto de lo anterior podemos ofrecer a los gobiernos locales y a los trabajadores involucrados una propuesta de acción en donde todos sean receptores de beneficios y oportunidades para la mejora de la calidad vida. Sustituir la tracción a sangre por tracción motora es mucho más que una cuestión tecnológica, para nosotros significa la construcción de condiciones prósperas para la mitigación de la vulneración de los derechos de las personas y de los animales”. 

– Haciendo un balance del trabajo realizado en Argentina, ¿cuáles han sido las principales dificultades que se han afrontado, a lo largo del proceso?.

“En la actualidad con un trabajo territorial en más de 10 provincias argentinas, el desafío más significativo y repetitivo es lograr que los gobiernos locales transformen su interés en acciones sustentables que den respuesta a la problemática. Es decir, hoy la sociedad en su conjunto expresa su preocupación/rechazo ante la tracción animal, los políticos toman nota de ello e intentan traducir esa demanda ciudadana en una respuesta de gobierno. El proceso no es fácil… a veces esa acción de gobierno es una vaga respuesta que no contempla la vulnerabilidad de los actores involucrados, y/o en el peor de los casos la respuesta es inexistente.

Cuando existe predisposición política, el equipo AcerTaS pone a consideración de los gobiernos locales insumos para la gestión de la problemática social. Desde un principio se exige que una política pública integral como la que se propone sea dotada de sustentabilidad metodológica, técnica y económica a través de dispositivos legales creados para tal fin. Es aquí el mayor desafío, el nivel de compromiso de los gobiernos locales no siempre está a la altura de las circunstancias.

Otro desafío que se presenta es la estigmatización de las familias carreras como delincuentes, maltratadores de animales, entre otros. Esto lo dificulta todo y más aún al momento de construir vínculos de confianza que posibiliten comenzar a trabajar en territorio. Algunos dirigentes políticos y sociales están convencidos de que la tracción animales es sinónimo de maltrato animal, y con ello en la mayoría de los casos se relativiza e invisibiliza la problemática social que al fin de cuentas es lo que motiva la utilización de animales para la subsistencia de las familia.

Desde AcerTaS consideramos que si mejoramos la calidad de las personas, indudablemente debe mejorar la calidad de vida de los animales”. 

– Uno de los lugares en los cuales han trabajado ustedes ha sido Godoy Cruz, en la Provincia de Mendoza. ¿Cómo fue el proceso de sustitución?, ¿Cuál es el mensaje que le gustaría transmitir?.

“La experiencia en el Departamento de Godoy Cruz, Provincia de Mendoza, da cuenta lo beneficioso que puede ser aplicar la estrategia AcerTaS como acción inmediata para paliar la situación de vulnerabilidad económica, social y ambiental de las personas y animales involucradas en la problemática de la tracción animal. Un proceso que comenzó en el 2014 con la sanción de una ordenanza municipal que plantea las pautas claves de trabajo, y que se materializa en el 2016 con la conformación del equipo de trabajo gubernamental, la identificación de la población objetivo y con la instrumentación de una “prueba piloto” de 11 vehículos motorizados que sustituyeron carros y equinos involucrados.

Para la Red Internacional AcerTaS el caso de Godoy Cruz es uno de los más valiosos. Es único caso latinoamericano certificado por nuestro equipo de trabajo, y eso se ha visto motivado por la excelente receptividad que ha tenido el municipio para con las guías de buenas prácticas, protocolos y demás instrumentos que proveemos a quien está dispuesto a materializar la política pública de sustitución de los vehículos de tracción animal por vehículos de tracción motora.

Vale destacar los nuevos vínculos sociales que se ponen de manifiesto a la hora visibilizar la problemática de la tracción animal. Personal municipal que anteriormente estaba totalmente ajeno a la problemática social y a la de los animales, de pronto debe comenzar a diseñar estrategias e instrumentos que faciliten el abordaje integral como así también intersectoral. Vecinos que antes les negaban el saludo a los carreros, ahora trabajan asociativamente con los Recuperadores Urbanos en el separación en origen de los residuos reciclables. Las empresas, en el marco de sus responsabilidad social, intervienen como potenciales inversores y/o como proveedores de grandes volúmenes de material reciclable. Los adoptantes de equinos comienzan a entender el por qué es necesario involucrarse en la realidad de las familias que están junto a los animales maltratados. Inclusive los carreros más reticentes al cambio tecnológico al ver que sus colegas le mejora su calidad de vida, comienzan a cuestionar los prejuicios negativos que hasta el momento les impide involucrarse.

Godoy Cruz, representa la experiencia en donde TODOS GANAN: Trabajadores, animales y la comunidad en su conjunto”. 

-Y finalmente, en el caso de Viña del Mar, se está llevando a cabo gestiones para lograr la sustitución de la tracción a sangre de los tradicionales coches victoria. ¿Cuál es el mensaje que le gustaría transmitir, tanto a las autoridades de la ciudad como a los otros actores involucrados (cocheros y animalistas)?.

“Consideramos que en la actualidad la Alcaldía de Viña del Mar tiene un gran problema en la puerta. El paseo en victoria hace a la postal tradicional de los viñamarinos desde hace décadas, sin embargo hoy esa postal se ve asociada a factores negativos tales como maltrato animal, drogadicción, conducción insegura y precariedad laboral. Esta caracterización coincide con reportes de la Contraloría General de Chile, con informes de organizaciones sociales, reportes periodísticos e inclusive testimonios de los propios cocheros.

Lo anterior nos lleva a preguntarnos si ese gran problema podemos convertirlo en una gran oportunidad.  La experiencia territorial nos dice que sí. Varias ciudades alrededor del mundo han comenzado a cuestionar el uso de animales de tiro, y es en el caso de la Ciudad de New York en donde los clásicos cocheros del Central Park sustituyen su medio de transporte por coches que no usan caballos pero que a su vez conservan la misma estética y funcionamiento de un carruaje histórico. 

La oportunidad no tan sólo radica en la mejora en el medio de transporte que se utiliza sino también se da un salto cualitativo en aspectos morales que hacen a la dignificación de la labor de los cocheros. Creemos que Viña puede sentirse orgullosa de un paseo en victoria seguro y responsable para todos.

Hoy el turista que llega a Viña desea que su recuerdo de la ciudad sea una grata experiencia. Creemos que los cocheros son un componente clave de ello, entonces se deben atender las problemáticas asociadas a la actividad. Y con “atender” hacemos referencia a la resolución de conflictos lo que dista mucho de una neta prohibición de la actividad, tal como muchos simplifican.

Un abordaje intersectorial de la problemática, con principal escucha hacia los cocheros puede acercarnos a la toma de decisiones  políticas correctas. Instituciones técnicas locales hoy tienen la oportunidad y la capacidad para el desarrollo y la adaptación de nuevas tecnologías de transportes es cuestión de comenzar a profundizar los canales de diálogo”.