Rucio es uno de los tantos perros que deambulaba por las calles de Santiago buscando día a día comida y amor, fue en ese andar donde hace un tiempo la Fundación Huella Animal lo rescató. El can, tiempo después se supo, tiene una infección urinaria respecto a la cual se ha luchado intensamente para que el animal esté bien y pueda vivir intensamente, un proceso en el cual se necesita la colaboración de todos para poder continuar.
En cuanto al estado actual de Rucio, desde la Fundación Huella Animal precisaron: “Rucio es resistente a la mayoría de los antibióticos de fácil administración. Y después de probar con los antibióticos más adecuados según el cultivo de orina, nos refirieron a la nefróloga para controlar de mejor manera esta infección. Ahí nos explicaron que la infección es un síntoma más que una enfermedad en sí misma, por lo que nos pidieron exámenes para ir viendo algunos parámetros y por suerte se descartó la posibilidad de que fuera algo endocrino o metabólico”, comentó la agrupación al respecto.
Bajo este contexto, una de las hipótesis que se maneja apunta a una posible conexión entre la infección urinaria y hiperplasia prostática atingente a el, por lo cual se va a requerir una castración patalógica.
Luego de su castración, acotó la entidad, estos son los pasos siguientes con Rucio: evaluar si efectivamente la próstata reduce su tamaño y si pasa la infección urinaria; controlar el estado de sus riñones y evaluar el estado y evolución de sus articulaciones, porque sigue con dolor en caderas y codos.
Por todo lo anterior, la entidad hace un llamado a que todos aportemos a la siguiente cuenta:
