Llaman a proteger a los cururos, tradicionales habitantes del Bosque de Reñaca cuyo hábitat está siendo destruido por proyecto inmobiliario

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Hace ya varios meses el tradicional Bosque de Reñaca, uno de los últimos puntos verdes de la ciudad de Viña del Mar, está siendo destruido a causa de un proyecto, impulsado por la inmobiliaria Argenta, que pretende construir un total de 19 edificios en la zona. Lo anterior ha traído como consecuencia, según denuncia la plataforma Salvemos el Bosque de Reñaca, la destrucción del hábitat de los cururos que tenían su hogar allí. 

“Debido a la destrucción de su hábitat, los cururos, desorientados, han construido sus madrigueras en un lugar muy concurrido, y dada la inoperancia de la inmobiliaria Argenta, que jamás se ha preocupado de los habitantes de este pulmón, como Salvemos el Bosque de Reñaca cercamos el lugar para su protección. Pedimos a la comunidad, respetar el espacio de los cururos, que finalmente tuvieron que huir y construir su madriguera en esta área. NO PERMITA QUE SU MASCOTA PASE LA CERCA (tenencia responsable), y por favor, ayude a mantener esta. Reiteramos que la inmobiliaria no tiene que ver con la cerca”, comentó al respecto el colectivo a través de sus redes sociales. 

Asimismo la agrupación criticó que, a pesar de la evidencia del daño socio ambiental del proyecto inmobiliario demostrado por la entidad, la iniciativa empresarial continuó su curso cin cesar. “El daño que está haciendo avanza a pasos agigantados. Volvemos a reiterar que la inoperancia e ignorancia de parte de la inmobiliaria está causando problemas en la fauna: los cururos llevan más de una semana viviendo aquí, y argenta ni siquiera le dio importancia”, concluyó el colectivo. 

Cabe señalar que el proyecto inmobiliario contempla la construcción de 435 departamentos, distribuidos en 19 edificios y un total de 599 estacionamientos en un espacio de 10,5 hectáreas que se encuentra en un área del sector medio de la cuenca del estero Reñaca, perteneciente a los Bosques de Reñaca. Intervención en un espacio natural, colindante con el Parque Natural Gómez Carreño y respecto al cual se está luchando para ser declarado como Santuario de la Naturaleza, que ha despertado la oposición de los vecinos por el impacto medio ambiental de la iniciativa creada por Argenta: por eso se organizaron y crearon hace un tiempo la agrupación Salvemos el Bosque de Reñaca.