Generalmente cuando hablamos respecto a los animales de compañía pensamos en perros y gatos, sin embargo a dicho grupo durante el último tiempo se ha sumado un nuevo integrante: los conejos. Un proceso que no ha estado exento de dificultades, pues si bien muchas de las normas que buscan proteger a nuestros compañeros peludos abarca a todos los animales, en la práctica lo anterior no se concreta.
En entrevista con epanews.cl, la abogada Karin Núñez, Directora del área legal de Bunny Lovers, analiza la realidad actual de los conejos a nivel nacional y los desafíos que se presentan para lograr un real cuidado de esta especie animal tanto desde la ciudadanía como a nivel jurídico y de políticas públicas.
1.De acuerdo a diversos estudios llevados a cabo por ustedes, se ha determinado que el conejo se ha transformado en el tercer animal de compañía detrás del perro y el gato. Frente a este escenario, ¿cuáles son las problemáticas que se pueden observar de aquello, pensando tanto a nivel jurídico como de políticas públicas?
“Como fundación (y bajo nuestros propios censos) hemos determinado que el conejo es el tercer animal que más se encuentra en los hogares de Chile. A su vez, estamos conscientes del nivel de maltrato que lleva este animal tanto para su reproducción, industria de carne, uso de sus pieles, experimentación e incluso como animal de compañía y el desconocimiento de las propias personas al mantenerlos toda su vida en una jaula pequeña sin un enriquecimiento ambiental necesario para esta especie.
Esta problemática nos lleva a:
Nivel jurídico: al no estar contemplado, las personas no toman la real consciencia de sus cuidados, por lo que existe mucho abandono, maltrato, pérdidas y, en este punto, recalcamos que la ley 21.020 no incluyó el dispositivo electrónico para conejos, el cual es una de nuestras peticiones con nuestra campaña #TambiénSonFamilia.
Políticas públicas: al no estar considerado en varios temas en la Ley de Tenencia Responsable, hay pocos profesionales en medicina veterinaria con especialidad en animales exóticos, derivando en consultas y operaciones excesivamente costosas y, por lo tanto, no existen campañas de esterilización a cargo de las municipalidades, instancias en las que buscan controlar la población de los animales y la educación de su tenencia responsable”.
2.Uno de los puntos que ustedes han criticado continuamente, respecto a nuestra legislación, dice relación con no contar con una vacuna esencial para los conejos. ¿Qué nos puedes decir al respecto?
“El conejo sufre de varias enfermedades, pero una de las más peligrosas es la mixomatosis, enfermedad mortal para esta especie que les provoca sufrimiento y finalmente la muerte. Chile no contempla la vacuna para estos casos y si bien el SAG mencionó en un informe pedido por nosotros por Ley de Transparencia que el año 2020 no hubo casos de este virus, no podemos esperar que con un caso y la probable propagación se determine que es necesaria tener la vacuna.
Sin vacuna además existe la restricción de poder sacar al conejo del país ya que exigen para que puedan ingresar a un país extranjero que tenga todas sus vacunas al día, y sin poder contar con ella nosotros no podemos viajar con nuestros conejos”.
3.Hace un tiempo lanzaron la campaña “También son familia”, donde buscan reflejar las necesidades de los conejos en todo sentido. ¿Qué nos pueden contar al respecto?, ¿cuáles son las proyecciones de la campaña?
“Nuestro propósito es poder llegar a todas las personas que tienen animales de compañía y, sobre todo, si tienen conejos para que tomen conciencia de que pese a que el conejo es una de las especies más populares en el país, se encuentra muy abandonada por la sociedad y las autoridades. Es necesario ampliar los animales de compañía; no solo es el perro y el gato, existen muchos animales en la categoría de exóticos que ocupan lugares en los hogares de Chile y requiere que sea considerado como tal.
Queremos lograr que las aerolíneas permitan que el conejo pueda viajar en cabina y no en la maleta como actualmente lo permiten, siendo un riesgo muy alto para este tipo de animales.
De esta manera, de aprobarse considerar a los conejos como mascotas y/o animales domésticos, a partir del nuevo marco jurídico, esto permitiría campañas de esterilización por parte de las municipalidades, veterinarios con especialidad en exóticos, costos de todo tipo de procedimiento más económicos y mayor educación sobre sus cuidados”.
