#SANTIAGO La historia de Irma Soto y la búsqueda de hogar para sus perros, tras ser diagnosticada con un cáncer terminal

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Uno de los mayores temores que tenemos los amantes de los animales es el destino de nuestros compañeros de vida, ante una posible muerte o accidente que nos impida seguir cuidando y conviviendo con ellos . Sentimiento que aumenta si el diagnóstico es cáncer, siendo un ejemplo de aquello la historia de Irma Soto, una señora de 62 años diagnosticada con melanoma maligno, fase grado 4, que corresponde a un cáncer terminal.

La historia de Irma comenzó a escribirse el año pasado, época en la cual el cáncer se hizo presente en su vida. “Fui pintora, paracaidista. Trabajé y tuve un buen pasar, pero de repente vino el cáncer y se me vino una nube oscura que está hasta el día de hoy”, de ésta manera Irma Soto se presenta, en conversación con EPA news. Estuvo dos meses hospitalizada en el Hospital Militar, lugar donde se le amputó la mano a causa de los tumores que estaban presentes en ella.

El cáncer melanoma maligno grado 4 se traduce, acota Irma, “en la práctica  en que son tumores que aparecen en distintas partes del cuerpo. Primero me apareció uno muy grande en la mano, se me deformó la mano: era una mano grande llena de tumores reventados tanto que yo llegué al hospital que hicieran algo… yo pedí que me amputarán la mano, pues ya no podía con los dolores que eran terribles”, explicó Soto. Posteriormente aparecieron tumores en el cuello, clavícula, pulmones y, también, en la pierna.

Actualmente Irma se está tratando con terapias alternativas y la droga Helixor.

“En el tratamiento estoy con terapias alternativas, porque el Hospital Militar me dio tratamiento paliativo que es solamente para el dolor con el fin de que muera tranquila. Pero tengo que luchar, porque tengo unas hijas de cuatro patas, mis perri-hijas que las amó al igual que mi gata. Si yo muero van a quedar botadas y eso no lo puedo soportar. Estoy luchando para salir adelante como sea, con la droga y  las terapias alternativas  de Bio magnetismo, Bio Resonancia y Bio Energía”, explicó al respecto Irma Soto.

Las preocupaciones de Irma, hoy en día, son  la orden de desalojo que enfrenta a causa del no pago del arriendo de su casa por la imposibilidad de trabajar a causa del cáncer y el futuro de sus perritas, las cuales fueron rescatadas por Irma en el ayer. Precisamente este último punto nos recuerda la película Truman, la cual nos narra la historia de Julíán que es un actor argentino el cual tras ser diagnosticado con cáncer enfrenta un difícil dilema: encontrarle un hogar a su perro Truman.

Felizmente se han ido adoptadas algunas de las perritas  rescatadas por Irma en el pasado, quedando actualmente los siguientes animales:

-Lobita: Es una perrita de  5 años, es un poco tímida porque fue rescatada del maltrato y abandono. Es cariñosa y sociable con personas y otros perritos.

Lobita

Mila: Es una can de 6 años. Muy cariñosa con humanos y otros perritos.

Mila

-Canela y Thai: Son Madre e Hija, quienes nunca se han separado. Son muy cariñosas con los humanos pero no con otros perritos. Canela tiene  10 años y fue diagnosticada con  diabetes, por lo cual vive  con tratamiento de insulina;  su hija  es Thai y tiene 5 años, es muy sana. Se entregan en adopción juntas, pensando en el bienestar de ellas.

Canela y Thai

Si desea adoptar a alguno de los canes, favor contactarse con Rosi Viveros de Perrito Feliz, en el email rosiperritofeliz@gmail.com. 

Uno de los perritos adoptados de Irma Soto

Los animales son muy significativa para la vida de Irma, los cuales en la actualidad son su gran compañia. “Yo amo a los animales, los amo. Desde chica he estado en contacto con caballos, perros y gatos; siempre los he amado. Siempre he ayudado a los animales, veía a un perrito botado donde buscaba si tenía dueño y si no lo encontraba me quedaba con el. Así fui teniendo muchos perritos, pero los he ido entregando en adopción de a poco. Estoy en una situación que ya no puedo quedarme con ella, me duele muchísimo entregarlos porque los he tenido de toda la vida: la Thai la crié desde los dos meses, al igual que la Mila, la Lobita – a ella la encontré en un basurero, sentía que algo lloraba y la encontré sacándola del basurero-“, indicó al respecto Irma.

Cabe señalar que las necesidades más urgentes de Irma y sus perritos son reunir recursos que permitan costear los gastos diarios de Irma y mantención de los canes, la adopción de los canes reseñados y apoyo para arrendar un departamento donde pueda vivir la protagonista de ésta historia junto a dos perritas y una gata que la acompañarán hasta el fin de sus días.

La invitación es ayudar a Irma y sus perritos, a través de donaciones y apoyo económico. En el caso de esto último, se puede depositar o hacer transferencias a la Cuenta Rut 5841134 del Banco Estado, a nombre de Rosa Viveros -representante de Perrito Feliz-, rut 5.841 134-5, el email de confirmación es rosiperritofeliz@gmail.com y el asunto Ayuda a Irma. 

Todos podemos ayudar a que Rosita Viveros y Carolina Zamorano, además de otras personas que apoyan, puedan seguir ayudando a Irma a vivir decentemente su cáncer en un sistema que, a la larga, nos deshumaniza cada día más.

Producción: Carolina Arévalo