Tras la seguidilla de casos registrados de perros encerrados en vehículos, estacionados a pleno sol, surgió la campaña “Perrito encerrado, vidrio reventado” a través de las redes sociales. Iniciativa que ha sido compartida ampliamente durante los últimos días, con llamados a luchar por los derechos de los animales.
Frente a este escenario, la pregunta que surge es ¿cuáles son las implicancias legales asociadas al hecho de quebrar un vidrio, para salvar un perrito encerrado en un auto?. Si bien, en una primera instancia, al autor de dicho actuar se le podría imputar el delito de daños a la propiedad de terceros, hay normas jurídicas que se pueden utilizar a favor de quién ayudó al animal.
Esta norma se refiere a la figura jurídica de Estado de Necesidad, establecida en el artículo 10 del Código Penal. Lo anterior está explicado en el artículo 10, acápite 7 donde se indica:
“El que para evitar un mal ejecuta un hecho, que produzca daño en la propiedad ajena, siempre que concurran las circunstancias siguientes:
Primera.-Realidad o peligro inminente del mal que se trata de evitar.
Segunda.-Que sea mayor que el causado para evitarlo.
Tercera.-Que no haya otro medio practicable y menos perjudicial para impedirlo”, (Artículo 7, acápite 7 del Código Penal).
Bajo este contexto, el Estado de Necesidad “significa que cuando hay un peligro o una urgencia de frenar un delito más grave del que se comete, se puede realizar la acción. La idea es que la acción sea proporcional, tampoco se trata de que la gente ande quebrando vidrios por la vida y/o mirando hacia el interior de los autos y apenas vean al perro, al tiro quiebren los vidrios”, explicó María Celeste Jiménez, abogada especialista en derecho animal y Presidenta de Animanaturalis Chile, en entrevista con EPA news.
Para alegar el Estado de Necesidad como justificativo jurídico del actuar en defensa de los derechos de los animales, es necesario que sea proporcional a los hechos. “El Estado de Necesidad es, por ejemplo, estás en un teatro y se desata un incendio. Rompes la cortina para apagar el incendio, nadie te puede decir que dañaste la propiedad pues lo realizaste para ayudar, el punto es que sea bien evidente”, agregó Jiménez.
“Lo recomendable es que cuando las personas vean una situación de ese tipo, llame a Carabineros inmediatamente y ellos pueden romper el vidrio o descerrajar el vehículo con una orden que pueden conseguir en segundos, con eso se puede prevenir que una persona se vea envuelta en un delito”, acotó la experta en derecho animal.
Junto con pedir la asistencia de Carabineros para salvar al animal, la abogada motiva a la gente a que denuncie como un caso de maltrato animal lo acaecido con nuestro compañero peludo en el vehículo.
“El llamado que hago a la ciudadanía es que cuando vean a un animal encerrado en un auto, inmediatamente llamen a Carabineros y hagan la denuncia porque efectivamente eso constituye un delito, dado a que el animal está sufriendo. Eso es un acto de crueldad con el animal, el hecho de que el animal se quede encerrado y le falta el aire,claramente, es un signo de maltrato”, precisó la abogada María Celeste Jiménez.
Asimismo, la especialista señaló que “la idea es que la gente no utilice el delito como una herramienta de descargo, mucha gente va a empezar a mirar los autos y quebrar los vidrios por cualquier fin. Creo que no es bueno hacer apología del daño, sino más bien enseñarle a la comunidad de que existe la posibilidad de denunciar esa situación. Además, que esa situación denunciada puede tener una penalidad, por lo cual es importante que la gente actué siguiendo las normas legales; porque si solamente quiebran el vidrio, no van a conseguir que la persona dueña del auto y del animal pague por la maldad que cometió”, comentó la experta.
¿Qué pasa con la persona que rompió el vidrio?
De acuerdo a la abogada María Celeste Jiménez, la persona que sea detenida por reventar un vidrio puede enfrentar dos escenarios: ser detenido a la espera del control respectivo y/o citado a la Fiscalía, a la espera de dar cuenta de su versión de los hechos. En ambos casos, se puede alegar el Estado de Necesidad como argumento para explicar el actuar a favor de los animales.
En definitiva, las claves cuando se es testigo de un caso de un perro encerrado al interior de un vehículo es actuar de un modo racional buscando no sólo salvar al animal sino, también, lograr que el responsable del maltrato animal sufrido por el animal responda penalmente por su actuar.
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