El frío extremo, que está azotando a parte de Estados Unidos, ha afectado tanto a los animales en tierra como en el mar. Fue así como éste miércoles el equipo de Texas Parks Wildlife en conjunto con Sea Turtle, rescataron más de 2600 tortugas marinas que debido al gélido clima eran incapaces de nadar.
Según señalan en el instagram de los voluntarios y biólogos héroes, otros animales como delfines o manatíes pueden regular su temperatura, sin embargo, las tortugas quedan paralizadas y pueden morir por conmoción, depredación o choques con embarcaciones.
Asimismo, indican que no pueden dejarlas a la deriva porque son una especie amenazada, además de los profundos canales creados por los humanos para embarcaciones y cargadores pueden atraer a las tortugas a aventurarse en lo hondo y alejarse de la seguridad del Golfo.
Las tortugas y otros animales rescatados fueron llevados a instalaciones de rehabilitación donde les ponen generadores que les dan calor. Lamentablemente algunos se apagaron y cuestan muy caros, pero el equipo de vigilantes está optimista ya que todos descansan más seguros a su cuidado.
Una vez que se recuperen, serán liberados cuando el clima esté más cálido.
Tristemente animales en la tierra no han tenido tanta suerte, pues se comunicó que un grupo de primates murieron congelados en un santuario debido a las bajas temperaturas.
