Un muy buen ejemplo está dando el país bajo, ya que sin costo ha implementado varias estrategias para atraer y multiplicar la población de abejas. El animal más importante del planeta.
Según informan algunos medios en Internet, dicha nación transformó 316 paradas de autobús al colocarles jardines en el techo, aumentó las ciclovias e instaló caminos de flores en las autopistas.
“Estas medidas no solo pueden ayudar a combatir la contaminación del aire, una de las principales causas de muerte en Holanda, sino que también ayudará a revivir dos tercios de las más de 300 especies de abejas en peligro de extinción en el país” estima Global Citizen.
Así lo ratifican las autoridades del país de los molinos: “Las abejas ahora podrán hacer escala en estos hábitat ecológicos y se apoyará a la biodiversidad”.
Para dicha acción utilizaron plantas sedum que purifican el aire, capturan el polvo fino y almacenan agua de lluvia. Y como si esto fuera poco, el operador de la marquesina paga la instalación y el mantenimiento se auspicia con ingresos de publicidad.
Las abejas son responsables de hasta el 70 % de los cultivos en el mundo y, en Holanda, el número de esta especie ha aumentado un 45% desde la década del 2000 gracias a diversas acciones que ha realizado.
Sin duda, un ejemplo a seguir que vendría muy bien a este Santiago tan contaminado y de paso, se ayudaría a nuestras amigas las abejas a quienes le debemos tanto.
