Hace un tiempo la empresa Agricovial busca construir una planta, en las afueras de Molina, que producirá un total de 1.500.000 huevos diarios. Un proyecto que ha generado preocupación en la comunidad local, por las implicancias socio ambientales de la iniciativa.
De acuerdo a lo informado, la planta que se busca edificar contará con 11 galpones que tendrá un total de 160.000 gallinas ponedoras cada uno de ellos. Además, habrán 4 galpones para las denominadas gallinas libres, punto fuertemente criticado por la organización Animal Libre Chile puesto que acusan que dicho punto no va en beneficio de los animales.
A juicio de Animal Libre, la idea de las gallinas libres “no son más que grandes espacios, completamente cerrados, de 1.500 mts cuadrados cada uno y con capacidad para mantener hacinadas 24.000 gallinas cada uno, un espacio equivalente a 15 gallinas por metro cuadrado.Mediante este engaño de huevos de “gallina libre”, las avícolas están incrementando fuertemente su rentabilidad”, indicó al respecto la ONG internacional que este año cumplió 8 años.
Bajo este contexto, una de las preocupaciones de la organización es la realidad de las gallinas y su triste final, según acusan.
“Debido a las deplorables condiciones de vida de estas gallinas, encerradas en la oscuridad, respirando gases nauseabundos producto de sus desechos y la descomposición de gallinas muertas, su productividad disminuye pronto y normalmente antes de los dos años son descartadas en mataderos o directamente gaseadas y trituradas para la producción de alimento para otros animales.Para su reemplazo, la avícola ha dispuesto galpones de gallinas reproductoras e incubadoras con la capacidad de nacimiento de 30.000 pollitas por semana. Esto significa que cada día, serán sacrificados miles de pollitos machos recién nacidos por el solo hecho que por ser machos, no ponen huevos y no son rentables para la empresa”, acotó Animal Libre en el comunicado.
La instalación de la fábrica también es rechazada por la sociedad civil, como es el caso de la Municipalidad de Molina.
Otra de las preocupaciones de la Municipalidad y Animal Libre son las consecuencias que puede conllevar la avícola a los atractivos turísticos de la zona.
“La zona de Molina es conocida por sus atractivos turísticos, Radal y las 7 tazas, y también por ser una zona agrícola y vitivinícola, todas actividades que se va a ver seriamente perjudicadas por la contaminación de la avícola que según sus propios dueños produce 180 toneladas de guano TODOS los días. Las aguas de todo el sector se van a ver dañadas, los malos olores van a llegar a kilómetros a la redonda y a eso se suman los riesgos bacteriológicos que representan estos ambientes en los que se mantienen hacinadas y en pésimas condiciones de vida a millones de animales, diseminación de antibióticos en el ambiente y riesgo de severas enfermedades como la amenaza de la gripe aviar que en primer lugar va a atacar a los trabajadores de la avícola, a sus familias y sus vecinos”, señalaron en el texto Animal Libre.
En definitiva, un proyecto avícola que hasta el momento no ha escrito su capítulo final.
