Uno de los momentos que marcó la jornada de Noche Cero, nombre dado a la tardicional Gala del Festival de Viña del Mar y mediante la cual se buscaba remarcar la sustentabilidad, fue la perrita que se hizo presente en la alfombra cuando estaba pasando por ella Emilia Daiber, animadora de Chilevisión, modelando un vestido del diseñador Claudio Mansilla. El instante fue ampliamente comentado a través de las redes sociales, destacando que siempre los canes se hacen presentes en los más variados eventos públicos.
Tiempo después se supo que el animal, captado por la transmisión conjunta de Canal 13 y Televisión Nacional de Chile, se llama Moca y es una perrita rescatada desde las calles de la Región de Valparaíso. “Ella andaba vagando entre Viña del Mar y Concón, al tiempo supimos que tuvo familia y que al cambiarse ellos de casa a departamento, la dejaron en la calle porque no se la pudieron llevar”, cuenta María Loreto Schultz, tutora del can, en conversación con Página 7, agregando que con su familia comenzaron a preocuparse de ella.
Sin embargo, acota María Loreto, “con mi marido teníamos varios perros y no podíamos llevarla, era complejo, porque nos daba mucha pena verla en la calle, además, es muy tierna y tranquila. Cuando salíamos a pasear, nos la topábamos y nos seguía hasta la casa, entonces, era bien triste no poder tenerla, pero en octubre de 2019 murió una de las perritas que tenía mi mamá acá en Viña, y en ese contexto la llevamos en noviembre de ese año”, puntualizó Schultz.
Desde aquel entonces comenzó un proceso de cuidado y tenencia responsable con Moca, mas, tal como sucede con muchos animales rescatados, ella ama su libertad. “Nosotros somos mucho de la tenencia responsable, y ahora mi madre ha logrado que Moca no se escape, pues se acostumbró a estar en la casa. Hace harto tiempo que no se salía, casi un mes, ya que hemos tomado todos los resguardos, pero vamos a revisar nuevamente por dónde se escapó”, dijo María Loreto.
La familia de Moca se enteró por un mensaje de whatsapp de una vecina, quién dio la alerta sobre el paradero de la perrita y ante lo cual, pese a tomarse con humor lo acaecido, trabajarán firmenente para evitar nuevas escapadas de la perrita. “Nos da risa, pero también nos preocupa porque sabemos que también le puede pasar algo. “Vamos a tener que tomar más resguardos, aunque eso signifique que se tenga que perder otros eventos tan glamorosos”, precisó María Loreto.
En definitiva, la aparición de Moca en el evento viñamarino fue no sólo anecdótico sino, también, una visibilización de los miles de animales abandonados que día a día deambulan buscando una mano cariñosa y protectora la cual les proporcione comida y agua. Y también nos mostró una historia con un final feliz, de cómo una perrita abandonada encontró un hogar y familia responsable.
