6 de Junio 2020
Hace un par de semanas en Tunjuelito, Bogotá, unos delincuentes querían entrar a un local a robar celulares, sin darse cuenta que un sensible felino estaba al lado del establecimiento.
Según relatan medios locales de ese país, cuando se preparaban para violentar la puerta, uno de ellos piso al gato que zigzageaba entre sus piernas y de inmediato el minino se puso a gritar como loco y maullar en exceso, lo que despertó a todo el barrio y desconcertó a los maleantes, quienes se demoraron en retomar el asalto.
Un vecino que vio el hecho y los que escucharon al michi acusete alertaron a las autoridades, quienes llegaron al rato.
Aunque los malhechores alcanzaron a huir, el alaraco felino quedó como el héroe y los ladrones lo pensarán dos veces antes de volver.
