La asociación ambientalista Amor por los Animales Bolivia (APLAB) se dedica entre otras labores, a rescatar y buscarles una familia no sólo a perros y gatos, sino que también, a diferentes especies que lo necesiten.
Este fue el caso de Pau Pau, una pavita que vivía en malas condiciones, en una casa donde le mataron a su pareja y estaba en un ambiente frío y reducido.
Según la fundadora de dicha agrupación, Ana Serrano : “Sin duda, actuamos en el momento que la señora aceptó entregar a la pavita logrando trasladarla a un lugar donde no será comida y vivirá con los de su especie. Una familia la adoptó y cada cierto tiempo comparte fotos y videos de su feliz y tranquila vida”, relata.
Asimismo, hace algunos meses rescataron a Tamborcita, una coneja que estaba a punto de ser atropellada y ahora su humana dice que es una excelente compañía y es muy regalona.
Finalmente, Bartolo, un gallo que también fue rescatado, ahora atiende en el local de la calle Potosí y León, y en el fans page de APLAB lo describen en como “un capo vendedor”.
Con los cuidados necesarios, otros animales domésticos pueden ser excelentes compañeros peludos. Todos merecen el mismo amor, dedicación y respeto de nuestra parte.
