Hermosas historias nos regalan los animales en libertad. Al igual que nosotros, ellos viven su vida en base a los afectos y tienen diferentes personalidades.
La fotógrafa estadounidense Sandy Sisti se ha dedicado a observar y retratar las peripecias de una manada de caballos salvajes en el país del norte. En sus redes sociales nos cuenta la historia del semental Traveler, quien después de pasar la mayor parte de su vida como soltero y como amigo inseparable del jamelgo lisiado Snoodle, conoció a la joven yegua, Moonshadow y a su recién nacido, Magic, y su vida cambió.
“Nunca había visto un semental tan cariñoso o un potro tan enamorado de su “padre”. A diferencia de la mayoría de los jóvenes que pasan la mayor parte de su tiempo pegados a su madre, Magic rara vez se aleja del lado de Traveller y Traveller parece deleitarse con toda la atención. Son tan lindos juntos que ni siquiera sé qué decir. ¡Simplemente los amo!”, escribe.
Los lazos que han creado, este padre primerizo y su potro adoptado, son muy fuertes.
” Cuando veo a Magic tirar de la cola de Traveller, morderle las orejas, subir a su espalda e intentar todo lo demás para llamar su atención, y a Traveller muy contento con eso, me sorprende y emociona. Después de quince años, creo que Traveller finalmente encontró lo que estaba buscando”, reflexiona.
Por su parte el viejo Snoodle, después de que Traveller y Moonshadow se juntaron, se unió a un grupo de solteros mayores y pasa la mayor parte de su tiempo en su compañía.
Si quieres seguirles la pista a estos hermosos caballos, visita sus redes sociales o la página
www.wildatheartimages.
