Cerca de 50 elefantes podrá albergar el primer santuario de paquidermos de América latina, ubicado en el estado central de Mato Grosso, Brasil. El santuario fue inaugurado por la asociación norteamericana Global Sanctuary for Elephants, entidad que trabajó en conjunto con organizaciones cariocas para rescatar elefantes utilizados en circos del país.
Este apoyo local permitió además el rescate de las dos primeras integrantes del santuario, Maia y Guida, elefantas recuperadas tras cuarenta años trabajando en circos. Ambas fueron trasladadas desde Paraguaçu, granja que era propiedad del abogado del circo donde se exhibían, lugar en el que además habían pasado la última década con cadenas en sus pies, sin ninguna libertad o posibilidad de movimiento.
Las elefantas llegaron al santuario este pasado 11 de octubre, y según Scot Blais, director ejecutivo de Global Sanctuary for Elephants, ambas se han adaptado de manera positiva a su nuevo ambiente. “En su primer contacto sin una barrera, Guida fue un poco a la defensiva, pero después de eso fue como si hubieran estado juntas, lado a lado, y hubieran sido mejores amigas desde hace 50 años”, agregó.
A estas dos integrantes se espera que además se sume Ramba, la elefanta que fue rescatada del Circo los tachuelas, y quien actualmente se encuentra viviendo en el Parque safari de Rancagua, ubicado en la VI Región. Su viaje a Brasil está contemplado para 2017, momento en que estaría ya rehabilitada y recuperada tras 14 años en cautiverio.