Durante la jornada de este jueves, un grupo de detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Contra la Salud Pública y el Medioambiente Metropolitana (Bridesma) acudió hasta una casa residencia ubicada de Conchalí, Región Metropolitana, luego de una denuncia por un grave maltrato animal acaecido en el inmueble. En el lugar se encontraron 13 canes que vivían bajo paupérrimas condiciones.
En este contexto, el subprefecto Luis Mardones, jefe de Bridesma, manifestó que “oficiales especiales de esta brigada especializada, en virtud de una orden de investigar por el delito de maltrato animal, concurrieron hasta un domicilio particular en la comuna de Conchalí, logrando establecer el delito de maltrato animal en una persona mayor de edad, chileno, quien mantenía 13 caninos en deplorables condiciones”, señaló Mardones.
Asimismo Mardones comentó: “los detectives detectaron en el lugar que se dan las condiciones y todos los supuestos tanto de una tenencia irresponsable como de un maltrato animal. Todos estos caninos se mantenían en un hábitat en condiciones deplorables, sin contar con medidas de salubridad básicas, desnutridos, con abundante presencia de ectoparásitos y con enfermedades que no han sido tratadas médicamente”, dijo el representante de la PDI.
Cabe señalar que los perros fueron incautados y quedaron en poder de la Fundación Ayuda Callejeros de Curacaví bajo la figura de depositarios provisionales, hasta que la justicia defina el futuro de la denuncia y el acusado en la misma.