Un trabajador de una granja lechera en Somerset, Inglaterra, ha sido condenado a 12 semanas de prisión y un año de inhabilitación por el brutal maltrato a las vacas y terneros.
“Este es el peor caso de maltrato animal que he visto en mis 23 años de carrera y puedo decir que he visto algunos casos horribles. Por ello este Juzgado opina que esta crueldad excede el umbral de la condicional”, ha señalado el juez que ha llevado el caso, Jeff Collingwood.
El caso fue desvelado en diciembre de 2016, cuando la organización Igualdad Animal pudo grabar, tras el aviso de un vecino de la zona, al trabajador, Owen Nichol, de 19 años, pateando a terneros para que se pusieran en pie, golpeando a las vacas con las puertas de metal o incluso lanzando terneros recién nacidos contra el suelo.
“Nos complace anunciar que este trabajador de granja ha sido condenado a prisión por sus terribles ataques a vacas y terneros inocentes, tal como se ha revelado en nuestra investigación. Agradecemos a la Sociedad Protectora de Animales en Reino Unido (RSPCA) la rapidez con la que han procesado este caso. Nuestra única frustración ahora es que la ley aún no admite condenas más severas en casos de abuso animal” ha señalado Toni Shephard, directora de Igualdad Animal en Reino Unido, en un comunicado.
“Este caso no hace más que evidenciar la peligrosa falta de supervisión en la industria ganadera y la completa ausencia de inspecciones sin previo aviso. Sin nuestra investigación, este trabajador seguiría hoy golpeando a esos pobres animales”, ha añadido.
La organización ha desvelado otros casos de maltrato en granjas en Inglaterra y España. En 2012 dos trabajadores fueron grabados golpeando lechones con una barra de metal hasta la muerte en la granja Harling Farm, en Norfolk. Ambos fueron declarados culpables del maltrato y uno de ellos fue enviado a prisión por 18 semanas. En septiembre de 2016 tres trabajadores en España fueron condenados por golpear con barras de metal y apuñalar cerdos de su granja tras una grabación.
Fuente: publico. es