28 de Noviembre 2019
Durante la madrugada de este miércoles, un grupo de desconocidos atacó y posteriormente incendio la estatua en homenaje al perro Negro Matapaco, levantada en el Parque Balmaceda, cercano al Metro Salvador.
El hecho causó profunda indignación en el mundo de la protección animal, quienes repudiaron el accionar de los desconocidos en contra de la estatua de un personaje perruno que, a esta altura, se ha convertido en un símbolo de las manifestaciones realizadas en nuestro país desde el pasado 18 de octubre e incluso su fama ha traspasado fronteras: el rostro del can ha sido retratado a través de pinturas y murales en países como México, España y Japón.
Tras conocidos los hechos de la destrucción de la estatua, un grupo de jóvenes artistas se unieron y lograron hacer una réplica de la estatua del Negro MataPacos en el tradicional sector de Providencia, a base de flores y hojas.
La historia del can Negro Matapacos comenzó a escribirse durante el año 2011, el can comenzó a estar presente en las manifestaciones generadas bajo el alero del llamado movimiento estudiantil bajo el primer gobierno de Sebastián Piñera. Allí se hizo famoso por estar siempre al lado de escolares y universitarios y ladrarle constantemente al carro lanza aguas, bombas lacrimógenas y efectivos de Carabineros.
A partir de entonces fue bautizado como Negro Matapacos, ganándose el cariño de la gente que día a día lo veía circular en el centro de Santiago y donde era acogido en las universidades que hay en el lugar. El año 2013, un grupo de estudiantes de la Universidad Santo Tomás retrato la historia del can en el documental Matapaco (2013).
El can falleció en el mes de agosto del año 2017, producto de su avanzada edad y diversas enfermedades que tenía.