#SALUD Las claves para evitar que nuestros animales sufran en días calurosos

0
286

Durante la jornada de este miércoles, de acuerdo a lo informado por la Dirección Meteorológica de Chile, la temperatura llegó a una máxima de 37,3 grados en la ciudad de Santiago y con lo cual se superó el anterior que databa del año 1915 con una temperatura de 37,2 grados. Un calor extremo que no solamente nos obliga a nosotros los seres humanos a tomar precauciones para evitar episodios de deshidratación sino también preocuparnos de nuestros hermanos menores, los animales que también requieren cuidados.

Según los especialistas, un punto clave a considerar es estar atentos a los signos que los animales puedan demostrar ante un caso de deshidratación. Una forma de descartar dicho estado es hacer un pliegue de la piel del animal en la región costal o cervical inferior y ver el tiempo que se demora en volver a la normalidad, si se encuentra bien hidratado la piel volverá a su posición original de manera instantánea.

Otros indicadores de una posible deshidratación, plantean los expertos, son letargo al caminar y sequedad en sus encías, lenguas y orejas.

Asimismo, la humedad del ambiente es otro factor a considerar en cuanto a los cuidados se refiere. “Es importante recordar que no se trata sólo de la temperatura ambiental, la humedad también puede afectar a su animal. “Los animales jadean para evaporar la humedad de sus pulmones, lo cual quita el calor de su cuerpo. Si la humedad es demasiada alta, no son capaces de refrescarse, y su temperatura se disparará a niveles peligrosos, muy rápidamente.”, explica el Veterinario Barry Kellogg de la  Humane Society Veterinary Medical Association.

La hidratación en los animales es fundamental

Los cuidados principales que se deben tener en cuenta son:

1. No dejar nunca a nuestros animales encerrados en los autos y a pleno sol.

2. Las caminatas diarias, para aquellos animales acostumbrados a salir, se deben hacer al atardecer o muy temprano en la mañana. Evitar que los animales pisen asfaltos calientes, pues la zona de la almohadilla de sus patas  tanto de perros como de gatos es altamente sensible y pueden quemarse, como ha sucedido algunas veces.

3. Tener a disposición del animal siempre agua fresca, con el afán que pueda hidratarse.

4. Frenar el juego de los perros, si se les nota muy agitado, pues ellos no saben parar y hacer que se hidraten.

Es importante evitar, a toda costa, un temido golpe de calor en nuestros animales, conocido también como hipertemia. Esto último corresponde a  “un cambio brusco de la temperatura, donde el organismo no alcanza a regular o adaptarse. La temperatura puede sobrepasar fácil los 45 o 60 grados en pocos minutos”, explicó el Médico Veterinario  Patricio Moreno, del Laboratorio Drag Pharma.

Los golpes de calor se producen por las altas temperaturas, mala ventilación y falta de agua en los animales expresándose, indican los veterinarios, a través de temblores, letargo, jadeos, vómitos y encías y lenguas muy secas.

Si llega a ocurrir un caso así, es clave llevar al animal a un lugar fresco y con un paño mojado comenzar a refrescar sus distintas partes del cuerpo, jamás envolverlo y mojar sus encías. Es importante jamás obligarlo a tomar agua o mojarlo directamente, ya que puede generar un episodio de vasoconstricción, es decir, una sensación de calor mayor en el perro o gato. Se debe llevar inmediatamente al veterinario, con el afán de que pueda evaluar al animal, pues en algunos casos a causa del golpe de calor puede tener secuelas.

En definitiva, la invitación es a preocuparse de nuestros animales en días calurosos, pues ellos, al igual que nosotros, también sufren por las altas temperaturas en el ambiente.