La sorprendente historia de Estela, la ovejita que lucha por sobrevivir en el Santuario de Igualdad Interespecie

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Desde pequeños a cada uno de nosotros nos enseñan los diversos animales que hay en una granja bajo una perspectiva de reproducción de los mismos pensando en diversos fines como es el caso de alimentación y nadie nos explica las emociones de estos animales. Un ejemplo de ello es la historia de Estela, una tierna ovejita que lucha por sobrevivir día a día en el Santuario de Igualdad Interespecie, situado en las afueras de la Región Metropolitana.

Estela, una oveja bebé, fue rescatada por activistas pro veganos y llevada hasta el santuario antes mencionado. Se encontraba encerrada en un corral del tamaño de un departamento de un ambiente, acompañada de treinta ovejas más que en más de una ocasión estuvieron a punto de aplastarla: su día a día era estar en el mismo lugar, dormir allí y todo eso mientras sus heces estaban a sus pies.

“La madre de Estela era una de esas ovejas. Estaba muy enferma y había perdido todo su instinto materno, cosa que no es rara para animales que viven toda su vida en condiciones de maltrato, encierro y estrés constante. Estela estaba allí, parada en medio de una treintena de ovejas adultas que se movían de un lado a otro. Intentaba incansablemente encontrar a su mamá, pero no podía. Como su madre no le dio nada de leche en 24 horas, ella estaba muy débil y apenas podía levantar sus pies del suelo”, recuerdan con emoción los miembros del Santuario en una publicación de la fans page de la iniciativa por los animales.

Cada hora que pasaba era una lucha para vencer a la muerte, una lucha donde finalmente triunfó la vida y sus ganas de vivir.

Pese a ser rescatada, Estela presentaba un daño importante en su organismo. No tomó calostro y tampoco comió en 32 horas, por lo cual la protagonista de ésta historia no tendrá un sistema inmunológico  hasta los tres meses de edad. Un panorama complicado, pues deberá luchar contra virus y bacterias que le pueden provocar la muerte.

Hoy Estela, al igual que otro rescatado del Santuario llamado Agustín, se encuentran viviendo una etapa de transición donde la etapa de la cuarentena llega a su fin y comienzan a salir poco a poco a conocer y disfrutar el lugar conociendo a los otros animales allí presentes. Un proceso gradual y de aprendizaje para el animal, para que de ésta manera inicié una vida independiente en el Santuario.

Si deseas ayudar a la recuperación de Estela, puedes hacerte padrino de ella desde $5000 mensuales. Tu ayuda permitirá que ella pueda tener el alimento necesario y los cuidados veterinarios requeridos. La idea, plantean los administradores del Santuario, es no solamente la entrega del aporte monetario sino también que la persona donante vaya conociendo y generando una relación con el animal apadrinado. Para mayores informaciones en torno al proceso, has clic aquí.

Al final de cuentas, una historia que nos demuestran como todos los animales expresan sus sentimientos y nos motiva, sin lugar a dudas, a seguir luchando por cada uno de nuestros ideales a pesar de las dificultades en el camino.